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Scott Warren se enfrenta a 20 años de prisión por proporcionar ayuda humanitaria

Estatus: 
En espera de juicio
Sobre la situación

El 2 de julio, la Fiscalía de los Estados Unidos de Tucson, Arizona, anunció que sometería de nuevo a Scott Warren a juicio por un caso de delito grave. El gobierno retiró los cargos por conspiración y volverá a llevarlo a juicio el 12 de noviembre por dos delitos de acogida a migrantes.

El 11 de junio, el jurado del juicio por delito grave contra Scott Warren no pudo emitir una sentencia, lo que llevó al juez a declarar juicio nulo sobre el caso. En la tarde del 11 de junio, el juez de distrito Raner C. Collins llevó al jurado de 12 personas al tribunal federal de Tucson, después de que indicaran por segunda vez que estaban bloqueados en la decisión sobre los tres delitos por los que se acusaba a Warren. El juez desestimó al jurado después de que cada uno de sus miembros le dijera que no alcanzarían un veredicto a pesar del tiempo adicional proporcionado. Ocho de los doce miembros del jurado se comprometieron a declarar a Scott Warren "inocente".

El 29 de mayo de 2019, Scott Warren se enfrentará a un juicio por un delito grave en el Palacio de Justicia de los Estados Unidos Evo A. DeConcini en Tucson, Arizona. El defensor de los derechos humanos está acusado de dos delitos de "acogida" a migrantes en Ajo, Arizona, y un delito de "conspiración para transportar y acoger" a migrantes. Si lo declaran culpable, podría enfrentarse hasta 20 años de prisión.

Sobre Scott Warren

El Dr. Scott Warren es miembro del grupo No more deaths / No Más Muertes, que proporciona agua y asistencia médica en las rutas de migración y documenta las muertes de migrantes en el desierto. Vive en Ajo, Arizona y durante más de diez años ha brindado ayuda humanitaria para salvar vidas a personas migrantes y solicitantes de asilo que intentan cruzar la frontera México-EE. UU. a través del desierto de Sonora.

4 Julio 2019
Scott Warren a la espera de un nuevo juicio

El 2 de julio, la Fiscalía de los Estados Unidos en Tucson, Arizona, anunció que sometería de nuevo a Scott Warren a juicio por un caso de delito grave. El gobierno retiró los cargos por conspiración y volverá a llevarlo a juicio el 12 de noviembre por dos delitos de acogida a migrantes.

4 Julio 2019
Jurado del juicio de Scott Warren en desacuerdo

El 11 de junio, el jurado del juicio por delito grave contra Scott Warren no pudo emitir una sentencia, lo que llevó al juez a declarar juicio nulo sobre el caso. En la tarde del 11 de junio, el juez de distrito Raner C. Collins llevó al jurado de 12 personas al tribunal federal de Tucson, después de que indicaran por segunda vez que estaban bloqueados en la decisión sobre los tres delitos por los que se acusaba a Warren. El juez desestimó al jurado después de que cada uno de sus miembros le dijera que no alcanzarían un veredicto a pesar del tiempo adicional proporcionado. Ocho de los doce miembros del jurado se comprometieron a declarar a Scott Warren "inocente".

29 Mayo 2019
Scott Warren se enfrenta a 20 años de prisión por proporcionar ayuda humanitaria

El 29 de mayo de 2019, Scott Warren se enfrentará a un juicio por un delito grave en el Palacio de Justicia de los Estados Unidos Evo A. DeConcini en Tucson, Arizona. El defensor de derechos humanos está acusado de dos delitos de "acogida" a migrantes en Ajo, Arizona, y un delito de "conspiración para transportar y acoger" a migrantes. Si lo declaran culpable, podría enfrentarse hasta a 20 años de prisión.

El Dr. Scott Warren es un defensor de derechos humanos que trabaja en asuntos de migración en Ajo, Arizona.  Durante más de diez años ha brindado ayuda humanitaria a migrantes y solicitantes de asilo que intentan cruzar la frontera México-EE. UU. a través del desierto de Sonora. Ayudó a crear el grupo de ayuda humanitaria No more deaths / No Más Muertes, que proporciona agua y asistencia médica en las rutas de migración y documenta las muertes de migrantes en el desierto.

El 29 de mayo de 2019 a las 9:30 am, comenzó el juicio de Scott Warren en el Palacio de Justicia de los Estados Unidos Evo A. DeConcini en Tucson, Arizona, por dos delitos de "acogida" a migrantes y un delito de "conspiración para transportar y acoger" a las personas migrantes. El 21 de mayo de 2019, el juez asignado al caso rechazó una moción para desestimar la acusación. Los abogados de Scott Warren argumentaron que el caso contra Warren "surgió de la aplicación selectiva de las leyes por parte de la Patrulla Fronteriza" y que estaba siendo objeto de ataques específicamente por su trabajo de defensa de los derechos de las personas migrantes. La moción de los abogados incluyó evidencias de las actividades de vigilancia llevadas a cabo contra Warren por la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos.

El 17 de enero de 2018, Scott Warren fue detenido en un punto de reunión de voluntarios conocido como el "Granero", ubicado en Ajo, por un convoy de agentes de la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos de una unidad especializada contra el tráfico de personas. Los agentes iban de paisano, no presentaron una orden judicial al defensor de derechos humanos y e ignoraron su petición de abandonar la propiedad. Anteriormente ese día, No Más Muertes había publicado un informe denunciando la destrucción de los galones de agua por parte de los oficiales de la Patrulla Fronteriza que voluntarios/as habían colocado para los/as migrantes que cruzan el desierto.

La criminalización de Scott Warren representa una escalada de los patrones existentes de hostigamiento contra voluntarios/as humanitarios/as y defensores/as de derechos humanos en Arizona. En 2018, los oficiales de los Servicios de Pesca y Vida Silvestre citaron a Scott Warren y a otros/as voluntarios/as de No More Deaths por entrar en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Cabeza Prieta, uno de los corredores de migrantes más mortales a lo largo de la frontera México-Estados Unidos, para brindar ayuda humanitaria, ofreciendo agua, alimentos y suministros médicos a las personas migrantes que cruzan el desierto.

El enjuiciamiento del defensor de los derechos de los/as migrantes forma parte de una serie de esfuerzos sistemáticos por parte de las autoridades de Estados Unidos para criminalizar a estas personas y se presenta en el contexto de una crisis migratoria exacerbada por la política migratoria en la frontera de "prevención a través de la disuasión". Se cree que esta política, que lleva a los/as migrantes y solicitantes de asilo a los corredores más mortíferos del desierto, causa miles de muertes y desapariciones. Cada año, se registra en Arizona el mayor número de muertes relacionadas con la migración en los Estados Unidos.

En recientes visitas a diferentes países, Front Line Defenders descubrió que la difamación y criminalización de la actividad humanitaria está aumentando en las rutas de las caravanas de migrantes. Los/as defensores/as de derechos humanos en México y Estados Unidos han sido objeto de detenciones, hostigamiento y criminalización por brindar ayuda humanitaria, es decir, por distribuir alimentos, agua y suministros médicos, y gestionar refugios de emergencia para las familias migrantes. La vigilancia, el interrogatorio y el hostigamiento judicial a estas personas son una prueba de que las autoridades de los Estados Unidos están incrementando sus tácticas de disuasión.

Front Line Defenders condena la criminalización de Scott Warren, ya que se cree que está motivada por su trabajo humanitario a las personas migrantes y por documentar sus muertes. Front Line Defenders también muestra su preocupación por el aumento de la utilización del poder judicial para atacar a los/as defensores/as de derechos humanos y organizaciones que asisten a los/as migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México, incluso mediante una aplicación selectiva de la ley.

Front Line Defenders urge a las autoridades en los Estados Unidos a:

1. Condenar enérgicamente la criminalización injusta de Scott Warren, así como de otros defensores/as de los derechos de las personas migrantes;

2. Retirar inmediatamente todos los cargos contra Scott Warren, ya que se cree que están motivados únicamente por su labor pacífica y legítima de defensa de los derechos humanos;

3. Garantizar en todas las circunstancias que todos los/as defensores/as de derechos humanos en Estados Unidos puedan realizar sus actividades legítimas de defensa sin temor a represalias ni restricciones, entre ellas el acoso judicial.