Defensor de derechos humanos Waldo Albarracín recibe serias agresiones físicas
El 10 de noviembre de 2019 durante la noche, una multitud de personas saquearon y quemaron la casa de Waldo Albarracín mientras su familia se encontraba en el interior. Asimismo, desde el 20 de octubre de 2019, Waldo Albarracín ha recibido numerosos mensajes directos por redes sociales amenazándole a él y a su familia de muerte.
El 21 de octubre de 2019 el defensor de derechos humanos, Waldo Albarracín recibió un ataque con gas lacrimógeno en la cara y posteriormente el impacto del mismo contenedor de gas en el cráneo. Dichos ataques se produjeron mientras el defensor protestaba pacíficamente para los derechos electorales en Bolivia.
Waldo Albarracín Sanchéz es un reconocido defensor de derechos humanos con una larga trayectoria en Bolivia. Fue Presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) de 1992 a 2003 y el Defensor del Pueblo boliviano de 2004 a 2010. Actualmente es Rector de la Universidad Mayor de San Andrés (La Paz) y Presidente del Comité Nacional de Defensa de la Democracia (CONADE), una plataforma civil de defensa de derechos políticos.
El 10 de noviembre de 2019 durante la noche, una multitud de personas saquearon y quemaron la casa de Waldo Albarracín mientras su familia se encontraba en el interior. Asimismo, desde el 20 de octubre de 2019, Waldo Albarracín ha recibido numerosos mensajes directos por redes sociales amenazándole a él y a su familia de muerte.
EL 20 de octubre de 2019, Waldo Albarracín recibió el impacto de un contenedor de gas en el contexto de una manifestación pacífica contra los resultados de las elecciones generales en Bolivia. Dicho impacto le provocó contusiones craneales leves y 14 días de incapacitación. Por este motivo, Front Line Defenders publicó un llamamiento urgente condenando los ataques hacia el defensor de derechos humanos por el ejercicio de su derecho a la libertad de expresión y asociación. En las semanas posteriores al comunicado, las amenazas por medio de redes sociales incrementaron significativamente, contando más de 60 mensajes amenazándole a él y a su familia en un mes y medio. Entre los mensajes más alarmantes se encuentran algunos como: “Eh cara de perro lacra ten cuidado con tus palabras por que si sigues así hablando mal de Sr. Presidente te voy hacer tragar cada una de tus palabras a puño limpio perro”, “cae evo y te ejecutamos guey ya jodiste mucho carnal tu decides cabrón” y “ahora tu familia está en peligro lo quemaremos en vivo carajo”.
En este este contexto de intimidación y hostigamiento, el 9 de noviembre de 2019, funcionarios públicos afines al gobierno de Evo Morales hicieron un llamado a Waldo Albarracín y a otros lideres sociales a abandonar el departamento de La Paz en 48 horas por “generar convulsión, violencia y división”.
Posteriormente, el 10 de noviembre de 2019, la familia de Waldo Albarracín se encontraba en su casa cuando observaron alrededor de 500 personas acercándose a ellos y decidieron evacuarla de manera inmediata. Dos de los hijos de Waldo Albarracín permanecieron acorralados hasta que lograron escapar por encima de los muros y refugiarse en casa de los vecinos, fue en este momento, cuando escucharon cómo los atacantes saqueaban su domicilio. De acuerdo a los testimonios, fueron los cuartos de los niños los primeros en ser incendiados. Desde la fecha del incendio siguen existiendo amenazas a través de mensajes directos por redes sociales. La familia del defensor de los derechos humanos ha presentado una denuncia ante la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC), por los delitos de asesinato e infanticidio en grado de tentativa.
Front Line Defenders condena la violencia hacia el defensor de derechos humanos Waldo Albarracín y muestra su preocupación hacia el claro patrón de ataques contra él y su familia. Asimismo, Front Line Defenders insta a las autoridades de Bolivia a tomar medidas para proteger de forma inmediata e incondicional la integridad física de Waldo Albaraccín y su familia.
El 21 de octubre de 2019 el defensor de derechos humanos, Waldo Albarracín recibió un ataque con gas lacrimógeno en la cara y posteriormente el impacto del mismo contenedor de gas en el cráneo. Dichos ataques se produjeron mientras el defensor protestaba pacíficamente para los derechos electorales en Bolivia.
Descarga el Llamamiento Urgente
Waldo Albarracín Sanchéz es un reconocido defensor de derechos humanos con una larga trayectoria en Bolivia. Fue Presidente de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (APDHB) de 1992 a 2003 y el Defensor del Pueblo boliviano de 2004 a 2010. Actualmente es Rector de la Universidad Mayor de San Andrés (La Paz) y Presidente del Comité Nacional de Defensa de la Democracia (CONADE), una plataforma civil de defensa de derechos políticos.
Dentro del contexto de las elecciones en Bolivia, llevadas a cabo el 20 de octubre 2019, el Tribunal Supremo Electoral (TSE), decidió suspender la implementación del sistema de recuento provisional de votos. Posteriormente, el lunes 21 de octubre de 2019, el TSE reanudó el cómputo oficial, lo que genero diversas sospechas por parte de la sociedad civil y la población en general. En el momento que grupos de la sociedad civil instauraron una vigilia pacifica fuera de las premisas del Tribunal, la policía decidió reprimir y dispersar a las personas mediante el uso de violencia física. En ese momento, Waldo Albarracín y otros integrantes de la sociedad civil decidieron unirse y fueron agredidos con gas lacrimógeno. Waldo recibió el impacto de un contenedor de gas, provocándole contusiones craneales leves por los cuales tuvo que permanecer 14 días incapacitado. Seguidamente, recibió varios ataques en redes sociales en los que se le difamaba e insultaba.
Esta no es la primera vez que Waldo Albarracín recibe ataques y amenazas por sus críticas al gobierno. Durante su mandato como Defensor del Pueblo, defendió acérrimamente los derechos de los pueblos indígenas y el buen funcionamiento de la democracia, denunciando las vulneraciones de los derechos humanos en Bolivia. Por este motivo, ha sufrido campañas de desprestigio por altas autoridades del gobierno, incluido el actual presidente, Evo Morales, quien, en 2018 calificó durante una conferencia de prensa a Waldo Albarracín de “resentido” y “alineado a la derecha”.
Front Line Defenders condena los ataques hacia el defensor de derechos humanos Waldo Albarracín por el ejercicio de su derecho a la libertad de expresión y asociación. Asimismo, Front Line Defenders expresa su preocupación hacia la violencia policial relacionada al proceso electoral en Bolivia.